Trastornos de la Conducta Alimentaria
Intervención con pacientes de anorexia, bulimia, trastorno por atracón y otros trastornos de la conducta alimentaria
Los trastornos de la conducta alimentaria son enfermedades graves y cuyo interés social ha ido en aumento debido a su complejidad y a las dificultades que existen para su diagnóstico y tratamiento.
Los trastornos de la conducta alimentaria se caracterizan por alteraciones en los hábitos de alimentación y/o de las conductas de control de peso, llegando a dañar la salud de quien lo sufre y afectando a su calidad de vida en todas las dimensiones.
Muchas personas piensan que los trastornos de la conducta alimentaria pueden ser algo pasajero, cuestión de edad, para llamar la atención, querer estar más delgadxs, etc. En definitiva, existen una gran cantidad de mitos sobre los TCA que no tienen ninguna base científica.
Los trastornos de la conducta alimentaria son mucho más que querer estar delgadxs. Por eso es muy importante detectarlos cuanto antes y actuar de forma precavida ante situaciones en las que creemos que pueden estar poniendo en peligro nuestra salud o la de las personas que nos rodean. Un diagnóstico precoz es importante para la recuperación total de la persona.
La anorexia nerviosa y la bulimia nerviosa eran hasta ahora los trastornos de la conducta alimentaria más conocidos, sin embargo, cada vez son más las personas que presentan otro tipo de alteraciones como el trastorno por atracón, el trastorno de evitación o restricción de la ingesta de alimentos, y siendo algo menos frecuentes la pica y el trastorno de rumiación.
Sin embargo, son muchas las personas que acaban recibiendo la etiqueta de Trastorno de la Conducta Alimentaria No Especificado (TCANE). No se trata de poner etiquetas si no de hacer un abordaje multidisciplinar que requiere la implicación de nutricionistas, psiquiatras, psicólogxs, y sobre todo una detección precoz para evitar que este trastorno se cronifique y en el que la prevención y la información cobran especial relevancia.
Quiero ayudarte, quiero ayudaros
En terapia no nos dedicaremos a discutir qué problema tienes o por qué motivo, sino en buscar la solución, en empezar la recuperación. Cuando tienes un trastorno de la conducta alimentaria te abordan pensamientos angustiosos sobre la comida durante cada minuto que está despiertx o incluso mientras duermes. Por ejemplo, una persona con TCA puede convertirse en un expertx cocinerx aunque no hubiera cocinado en su vida. A veces sienten frío durante todo el día o incluso sudores por la noche, pueden no tener ganas de hacer absolutamente nada, pero no pueden estar quietxs ni un minuto, e incluso tener ganas de que todo esto se acabe para no sufrir más, por el simple hecho de que sienten hambre, ya sea porque han llegado a un punto en el que se sienten incapaces de comer o ya sea porque no pueden parar de hacerlo.
Si estás en esta situación, da el paso, toma la decisión, di sí a recuperarte.
¿Qué es lo que vamos a hacer? Vivir, por eso es importante que empecemos ya, cuanto antes mejor.
Un segundo perdido es un segundo que no recuperas. No va a ser fácil, pero te aseguro que es menos fácil vivir un trastorno de la conducta alimentaria y tú lo estás haciendo, por tanto, recuperarte también es posible. Solo hay que invertir la dirección de la fuerza, quitársela al TCA para usarla a tu favor.
Creerás conocer todo sobre la enfermedad, pero hay muchas cosas que desconoces, por eso es necesaria la psicoeducación; para que comprendas todo lo que te está provocando esta enfermedad a nivel físico y mental, cómo afecta a tus relaciones sociales y a tu calidad de vida.
Encontraremos estrategias de afrontamiento en situaciones cruciales, desarrollarás conductas más adaptativas ya que durante mucho tiempo has estado utilizando lo que tú creías que te ayudaba a solucionar el problema, cuando en realidad solo lo estás manteniendo. Por supuesto trabajaremos para aumentar tu autoconfianza, autocompasión, autoeficacia, y digo aumentaremos porque sé que está ahí, solo que se ha quedado escondida por el trastorno, pero estuvo y está, solo hay que sacarlas a la luz de nuevo. Si algo tiene una persona que sufre un trastorno de la conducta alimentaria, es claramente fuerza, voluntad, habilidad e inteligencia, todas estas palabras describen a una persona con empoderamiento personal, pero durante todo este tiempo lo has estado utilizando en tu problema y a partir de ahora lo utilizaremos en tu recuperación. Se trata de utilizar tus habilidades en la dirección correcta.
Te aseguro que cuando empieces a mejorar y eches la vista atrás, te parecerá increíble y muy difícil el poder volver a repetir todo lo que has estado haciendo durante tu trastorno.
Es espectacular la cantidad de fuerza, tiempo, voluntad, sacrificio que se puede llegar a malgastar en estar mal cuando lo fácil y bonito sería invertirlo en estar bien.
El objetivo principal de la terapia es la recuperación total, te cuento cómo lo haremos:
• Psicoeducación: consiste en que conozcas los diferentes aspectos de la enfermedad, que tomes consciencia de ella, que sepas cuál es el estado óptimo de salud, las alteraciones producidas por la desnutrición y los mecanismos de afrontamiento.
• Veremos los conceptos erróneos que tienes sobre los alimentos y estudiaremos los alimentos que más miedo te producen y cómo hacerles frente, qué significa estar nutrido y cómo conseguirlo.
• Conseguiremos establecer un patrón alimenticio adecuado siguiendo tu ritmo y manteniendo los hábitos saludables.
• Trabajaremos la autoestima, autoconfianza, autocompasión, tu seguridad y habilidades sociales. Sacaremos partido a esas habilidades que tienes poniendo toda tu fuerza en la dirección adecuada.
• Reflexionaremos sobre la imagen corporal y los estereotipos socioculturales.
• Reconocerás los signos de ansiedad y las situaciones que te estresan y aprenderás a afrontarlas, a través de conductas y pensamientos alternativos.
• Planificarás el tiempo libre sin agobios, para que puedas disfrutar de él.
• Trabajaremos en la prevención ante las recaídas. Durante el proceso de recuperación te encontrarás muchos “baches” en el camino, pero según vayamos avanzando conseguirás pasar por encima de ellos, sin caer.
Todo el proceso se adaptará a tus necesidades y a tu ritmo
Este es tu proceso y aunque es muy importante el apoyo de familiares y amigxs, en este espacio nos dedicaremos a ti. El trabajo con otras personas de tu círculo será tratado cuando sea necesario y siempre que así lo solicites o lo soliciten. Recuerda que no estás solx.
Asesoramiento para familiares de pacientes con TCA
Si convives con una persona que está sufriendo un trastorno de la conducta alimentaria seguramente te asaltarán un montón de dudas sobre qué le ocurre y por qué, si será culpa tuya, cómo puedes ayudarle, por qué se enfada contigo, dudas sobre qué decirle, si se recuperará o no… En resumen, te gustaría saber qué es lo que puedes hacer tú por él o por ella.
En primer lugar, debes saber que la culpa no es tuya, pero puedes ayudarle de muchas maneras. En este espacio podrás hacer las preguntas que necesites por muy descabelladas que te parezcan, contestaré desde mi experiencia profesional y personal, y aprenderás cómo ayudar a esa persona que tanto te importa.
En la sesión:
• Conocerás las fases de los trastornos de la conducta alimentaria.
• Descubrirás cuál está siendo tu actitud ante este reto y buscaremos la posición más adecuada según la fase en la que se encuentre el paciente.
• Aprenderás a afrontar situaciones complicadas, tendrás claves para actuar y entenderás la importancia de la comunicación.
• Sabrás cómo poner límites.
• Clarificarás qué cosas os benefician a todos.
• Aprenderás qué cosas puedes hacer y cómo hacerlas para recuperar la cordialidad y estabilidad en casa.
Psiconutrición
La alimentación es una de los necesidades básicas para tu salud y para poder llevar una actividad diaria completa, tanto física como mental.
El objetivo de la psiconutricion es que tu relacion con la comida sea sana. Diferentes situaciones como el estrés del día a día, una simple discusión, problemas en el trabajo o las imposiciones estéticas de la sociedad, acaban reflejándose en tu forma de comer y en los alimentos que eliges, guiadx por las emociones, con el único objetivo de poder calmarlas.
Comer o no comer para calmar las emociones puede ser una respuesta adaptativa que funciona en un primer momento, pero que si se convierte en un hábito puede desembocar en problemas de salud física y mental.
¿Has oído hablar del hambre emocional, hambre mental, hambre física?
Seguro que sí, pero ¿sabes en qué consiste cada una de ellas y cómo identificar las señales que te da cada una?
En la sesión:
• Encontraremos qué situaciones hacen que te refugies en la comida o qué nudos emocionales no te dejan comer tranquilx.
• Trabajaremos la motivación, la autocompasión, la confianza y la seguridad en ti mismx.
• Pondremos foco en la tolerancia a las emociones que te están bloqueando.
• Eliminarás pensamientos y creencias erróneas sobre la alimentación.
• Aprenderás a controlar los impulsos, a comer de forma consciente y disfrutando.
• Desarrollarás rutinas y hábitos saludables.